Mi visión sobre el Campus de la Universidad de Almería era bastante fraccional y somera hasta hace unos meses. Había paseado siempre por su entorno de manera utilitaria. Hice allí un master y he impartido cursos de fotografía en sus aulas durante varios años. Jamás se me ocurrió durante este periodo armarme de mi cámara para convertirla en sujeto de mi trabajo creativo.
Solo cuando el Vicerectorado de Extensión Universitaria me propuso hacer un reportaje sobre él, con motivo del 25 Aniversario de la institución, me puse a observarlo con mirada fotográfica. Como suele ocurrir, acercarse a los mismos espacios buscando el punto preciso y la hora en que la luz transforma el ambiente del lugar durante unos minutos, permite descubrir una nueva dimensión en la que las líneas, los volúmenes y la diversidad cromática adquieren un relieve se oculta a quien no va con los mirada alerta y la mente centrada en la conexión artística de lo que sus ojos ven.
Estuve una semana paseándome por sus edificios y jardines para encontrar los puntos exactos de cada toma. Esperé en ellos los amaneceres y crepúsculos durante un mes para captar, cámara en trípode, las transformaciones que se producían en esos diez minutos tan escasos como mágicos en los que las luces artificiales y el resplandor azul del cielo se equilibran, en un instante muy precios del crepúsculo y el alba.
El material recogido durante ese periodo requirió de otro mes para seleccionar, fusionar y procesar veinte imágenes que se corresponden con otros tantos rincones reconocibles de la UAL. El criterio con el que los seleccioné tiene que ver exclusivamente con dos criterios meramente fotográficos, que diesen juego dentro de mi manera de entender la fotografía y que funcionasen en un formato cuadrado, que por otra parte resulta poco habitual en mi panorámica manera de captar la realidad.
El resultado se podrá ver en una exposición abierta que se montará en la Puerta de Purchena de la ciudad de Almería, del 3 al 29 de Abril.
Loading contexts...